Lo sucedido durante la semana presagiaba una clase fatal para el día de hoy: la opción que me habían dado en la Universidad no funcionó. Ayer por la noche me la pasé buscando alternativas e iba preparado con un par de opciones...
Justo cuando llegué encontré a un exalumno y trabajador de la escuela a quien le comenté casi quejándome, de la triste situación... amablemente se oferció a ayudarme y ¡voilá! todo se arregló...
Quedé muy complacido de la clase de hoy. Generé buenas expectativas con los alumnos y a la espera de cerrar el curso mejor el próximo sábado... sólo hay que preparar un equipo que, por el momento, no tengo a disposición...
sábado, febrero 26, 2011
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario