La maestra de quinto año

Año Chicuei Ácatl, Veintena Itzacualiztli, Dia Matlactli Coscacuauhtli

La semana pasada tuve un curso en la avenida Revolución, en la colonia San Pedro de los Pinos. De camino desde la estación del metro al lugar del curso, atravesé la calle 6… no se bien por qué siempre recordé la dirección: Calle 6, Número 7, Departamento 17, Colonia San Pedro de los Pinos. Esta es la dirección de mi maestra de quinto año de primaria, la maestra Rosa Alicia.

A principio del año escolar ella llegó en sustitución de la maestra Esther (nuestra maestra de 1º, 2º, 3º e inicio del 5º). Era joven, quizá 23 años. Venía de Jalisco y recién se había casado. De tez blanca y ojos verdes… y en una escuela unicamente de varones, esto era un verdadero acontecimiento. Muchos terminamos enamorados de ella.

Ese curso, supongo por la frescura de la maestra, resultó extraordinario: hicimos obras de teatro, guiñol, trabajamos en equipo, concursos, investigaciones, debates, en fin, muy enriquecedor.

Su marido era piloto de helicópteros y en una ocasión como premio a nuestro desempeño, al “equipo 3” (Almazán, Fonseca, Manzano, Ostria y Tovar) nos llevaron a la base de Santa Rosa a treparnos a uno de ellos.

En otra ocasión nos invitó a su casa. No recuerdo bien, pero creo que ese dia comimos palomitas y chicharrones con refrescos, vimos las fotos de su boda y le ayudamos a limpiar el departamento 17… a mi me tocó una pared de la cocina.

Fui seleccionado para la escolta y me fui de quinto año y de la tutela de la maestra Rosa Alicia. Me fui de sexto y algún día me enteré, cuando cursaba el primer año de secundaria, que ella se había regresado a Jalisco. Su marido había muerto en un accidente en helicóptero.