Como si el cielo supiera, poco antes del inicio de la asamblea, lloraba intensamente, entonces tomó la palabra: “El fraude electoral no sólo cerró el paso a un aspirante a la presidencia, sino que anuló de facto los derechos constitucionales del pueblo de México de escoger libre y democráticamente a quien gobierna los destinos de la nación”.
En consecuencia, en el marco de la resistencia civil pacífica que estamos llevando a cabo y con fundamento en el artículo 39, propongo para su análisis, discusión y en su caso, aprobación de la Convención Democrática Nacional, el siguiente plan:
- Desconocer el cómputo oficial
- Rechazar la usurpación
- Proponer a la CND, si constituimos un
Gobierno de la República, una coordinación de la Resistencia Civil
Pacífica. - Aplicar un programa de cinco puntos:
- Defender a lo pobres
- Defender el patrimonio
de la Nación - Hacer valer el derecho público de la información
- Desaparecer el estado patrimonial
- Luchar para que las instituciones nacionales sean objeto de una renovación profunda
- Propongo que la CND decida un órgano de gobierno
- Los acuerdo tomados por la CND deberán asumirse de manera voluntaria
- El nuevo gobierno no pedirá apoyo corporativo
Al término del discurso vi, principalmente a adultos mayores, llorando y a otros con los ojos “rasos” indignados, molestos o como escribió Benedetti “Consternados, rabiosos”
Al rato empezó a llover y Claudia me dijo que para donde iba, que me llevaba y le dije que para el 671 de 5 de febrero o a cualquier metro. Movió su carro y cuando se subió me dijo: “Llévate la manga, para que te cubras” entonces me di cuenta que tendría que caminar al metro…
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