martes, septiembre 23, 2008

Siempre lo supe (y hasta ayer hice algo)

Hace ya como un año que fui al optometrista,de esos que tienen un consultorio muy bonito y las paredes llenas de reconocimientos, cursos y diplomas. Recuerdo bien que me dio muchas recomendaciones y se portó conmigo como una amplia condescendencia cuando me explicó las ventajas de la operación para que no volviera a utilizar gafas.

Al salir me fui con la receta enmano y listo para mandar a hacer mis nuevas gafas. Cuando le entregué la receta al optometrista de nuestra confianza (lo conocemos hace años porque a todos los Ostria nos hace nuetras gafas) me dijo que las gafas que estaba pidiendo eran diferentes a las que debiera ser mi graduación. Le contesté (un poco limitado por cumplir con la normatividad impuesta por el servicio médico que me proporcionan) que esa graduación es la que me diagnosticaron y prefería no hacer alteraciones.

Desde la primera vez que los usé me causaron molestia, en ocasiones aparecían dolores de cabeza, pero heroícamente seguía usando lo lentes y hasta llegué a pensar que la dolencia se derivaba de la falta de uso.

Ayer volvía al optometrista, me hizo la revisión correspondiente, con lectura de letritas incluída. Al finalizar me dijo que me colocara las gafas que uso... y no ví con la claridad que esperé. Entonces saqué de su estuche las anteriores gafas y miré las letritas y dije: "maldita sea, lo sabía..." ví mucho mejor.

Lo sabía y hasta ayer hice algo para mejorar... que no vuelva a pasarme.

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